La concepción de salud ha evolucionado a través del tiempo, desde una mayor vinculación con las enfermedades y la muerte, hasta concepciones más relacionadas con las posibilidades de realización personal y colectiva, es decir, LA SALUD y la enfermedad son inherentes a la vida y expresan la forma como vive cada persona y cada población.
Ya no se considera a la SALUD como "la ausencia de en enfermedad" sino que lleva un enfoque holístico, basado en determinantes de los campos de salud de Lalonde, que canalizan los causales que conducen a la existencia de los mismos.
La salud, la enfermedad, la vida, son procesos, por lo tanto cambian, mejoran o empeoran y se transforman permanentemente.
En este sentido se puede acotar, que una de las formas en las que se expresan las condiciones de vida es a través del proceso SALUD - ENFERMEDAD, por lo tanto, fenómenos ambientales, políticos y sociales se manifiestan de manera particular en cada grupo social o individuo, expresan en su cotidianidad su inserción (individual y particular) en los procesos más generales de la sociedad.
Históricamente se ha dado un interesante desarrollo epistemológico sobre el concepto de la salud como Producto Social, entendida como: El resultante de la acción de la sociedad en su conjunto. La producción social de salud y bienestar en los espacios-población es, ahora, la responsabilidad de los actores sociales.
Esta nueva concepción de salud, exige de metodologías innovadoras para ser utilizadas en la construcción de los diagnósticos y Análisis de Situación de Salud, metodologías que además de superar los enfoques tradicionales fragmentados o reduccionistas, presenten suficiente consistencia entre el marco conceptual multifactorial y polidemensional en la producción de SALUD
No hay comentarios:
Publicar un comentario